En nuestros tiempos en que el género humano se une cada vez más estrechamente y aumentan los vínculos entre los su disposición con respecto a las religiones no cristianas. . . .Todos los pueblos forman una comunidad, tienen un mismo origen, puesto que Dios hizo habitar a todo el género humano sobre la faz de la tierra. .
La Iglesia Católica no rechaza nada de lo que en estas religiones hay de santo y verdadero. . . Por consiguiente, exhorta a sus hijos a que, con prudencia y caridad, mediante el diálogo y colaboración con los adeptos de otras religiones, dando testimonio de la fe y la vida cristiana, reconozcan, guarden y promuevan esos bienes espirituales y morales así como los valores socio-culturales que en ellos se encuentran.
. . . La Iglesia, por consiguiente, reprueba como ajena al espíritu de Cristo cualquier discriminación o vejación realizada por motivos de raza o color, de condición o religión.
Nostra Aetate, 1, 2, 5
A un nivel ulterior de su relación con gente de diferentes confesiones religiosas se presenta el diálogo de las obras y de la colaboración por objetivos de carácter unitario, social, económico y político que tienden a la liberación y promoción del hombre. . . cristianos y seguidores de otras religiones afrontan conjuntamente los problemas del mundo.
Diálogo y Misión, Secretariado para los no cristianos, 1984, 31
. . . .Los fieles laicos, con el ejemplo de su vida y con la propia acción, pueden favorecer la mejora de las relaciones entre los seguidores de las diversas religiones.